La Navidad es una época de unión y alegría, pero también es una gran oportunidad para reflexionar sobre la importancia de incluir a todos en nuestras celebraciones. Es el momento perfecto para construir conexiones significativas, valorar nuestras diferencias y garantizar que cada persona, independientemente de sus habilidades, culturas o necesidades, se sienta parte. Fomentar una Navidad inclusiva significa abrir espacios donde todos puedan participar, disfrutar y sentirse valorados, por eso, a continuación os dejamos una serie de consejos que os ayudarán a fomentar una navidad inclusiva en vuestras casas.

1. Crea espacios accesibles 🏡

La accesibilidad es clave para que todos puedan disfrutar de las celebraciones navideñas sin barreras ni incomodidades. Diseñar espacios inclusivos asegura que nadie se quede fuera y que todos se sientan a gusto pero… ¿Qué hay que tener en cuenta?

• Movilidad reducida: Organiza las reuniones en lugares que sean de fácil acceso. Intenta evitar aquellos espacios que tengan barreras como escalones o pasillos estrechos. Si es necesario, coloca rampas temporales o redistribuye los muebles para facilitar el paso de sillas de ruedas o andadores.
• Mobiliario adaptado: Ofrece sillas con respaldo y apoyo extra para personas mayores o con problemas de movilidad. Si hay niños pequeños o personas que necesitan estar cerca del suelo, coloca cojines o alfombras cómodas.
• Superficies amplias: Para actividades como manualidades, juegos o cenas, asegúrate de que las mesas sean lo suficientemente grandes y accesibles desde todos los lados.
• Iluminación y estímulos: Usa luces cálidas y evita las intermitentes o demasiado brillantes para no incomodar a personas con sensibilidad visual. Reduce ruidos de fondo, como música muy alta, para quienes son sensibles a estímulos auditivos, y proporciona espacios tranquilos para las personas que necesiten un descanso de la sobreestimulación.
• Señalización clara: Si el espacio es grande, coloca señales visibles para indicar baños, salidas o zonas de descanso. Esto puede ser útil para todos, especialmente para personas con discapacidades cognitivas o problemas de orientación.

Pensar en estos detalles transforma tus reuniones en momentos donde la inclusión y la comodidad son protagonistas, asegurando que todos puedan disfrutar al máximo la magia de la Navidad.

2. Organiza actividades inclusivas 🎨

Las actividades navideñas son una gran forma de reunir a la familia y a los amigos, pero es fundamental adaptarlas para que todos puedan participar, independientemente de sus habilidades o necesidades.

Manualidades para todos

• Herramientas adaptadas: Proporciona materiales como tijeras de punta redonda, pegamentos fáciles de usar, pinceles con mango grueso o rotuladores lavables.
• Opciones de actividades: Ofrece diferentes niveles de dificultad. Por ejemplo, los más pequeños pueden decorar con pegatinas, mientras los mayores cortan.
• Inclusión sensorial: Incorpora materiales que estimulen los sentidos, como fieltro, purpurina o arcilla de secado rápido.

🎵 Tip extra: Ambientar con música navideña suave hará que la actividad sea aún más especial.

Juegos cooperativos

Los juegos que fomentan la colaboración son ideales para incluir a todos y fortalecer el espíritu de equipo:

• Puzzles gigantes: Busca puzzles con piezas grandes y diseños atractivos que puedan hacerse en grupo.
• Juegos digitales inclusivos: Herramientas como nuestra app Kokoro Kids permiten que cada participante juegue a su nivel, adaptándose a sus capacidades y habilidades. Además, los juegos fomentan la colaboración y pueden combinarse con nuestras actividades manipulativas que puedes descargar de forma completamente gratuita.
• Dinámicas de equipo: Crea retos navideños, como construir la torre más alta con bloques o trabajar juntos para decorar un árbol de Navidad.

Cocina para todos

La cocina es una actividad que combina creatividad y trabajo en equipo, perfecta para una Navidad inclusiva:

• Recetas adaptadas: Prepara opciones aptas para quienes tienen alergias o restricciones alimentarias, como galletas sin gluten, sin lactosa o sin azúcar.
• Tareas para todos: Divide el proceso en pasos simples: alguien puede medir ingredientes, otro mezclar, y otro decorar. Esto permite que todos participen según sus habilidades.
• Aprendizaje divertido: Aprovecha la oportunidad para enseñar medidas, formas y colores mientras cocinan.

👨‍🍳 Propuesta extra: Organiza una «competencia» de decoración de cupcakes navideños, donde lo importante sea la creatividad más que el resultado final.

3. Adapta las tradiciones 🎁

Tradiciones como los villancicos, las decoraciones y el intercambio de regalos pueden adaptarse fácilmente para que todos se sientan representados:

• Villancicos para todos: Canta canciones en varios idiomas o incorpora instrumentos sencillos como cascabeles para quienes no se sientan cómodos cantando.
• Decoraciones inclusivas: Evita luces intermitentes o sonidos excesivos que puedan ser molestos para personas con sensibilidad sensorial. En su lugar, opta por elementos táctiles, como adornos de tela o papel reciclado.
• Regalos personalizados: Piensa en las necesidades y preferencias de cada persona. Un libro en braille, un juguete sensorial o un set de arte pueden ser buenas opciones.

🎁 Idea inclusiva: Organiza un «amigo invisible» temático donde todos puedan crear un regalo personalizado en lugar de comprarlo, promoviendo la creatividad y la conexión emocional.

4.Celebra las pequeñas cosas 🌟

Para poder celebrar una navidad inclusiva, no siempre son necesarias grandes cosas, a veces, los gestos más simples tienen el mayor impacto. Valorar y agradecer a quienes nos rodean es una forma perfecta de incluir y conectar con los demás.

Gestos sencillos que transforman momentos

• Tarjetas navideñas personalizadas: Dedica tiempo a escribir mensajes únicos para cada persona. Resalta algo especial sobre ellas o comparte un recuerdo significativo, una nota escrita a mano demuestra atención y aprecio.
• Palabras de gratitud: Durante las celebraciones, haz un esfuerzo consciente por agradecer la presencia de cada persona. Un simple «me alegra que estés aquí» puede marcar la diferencia para alguien que se sienta inseguro o fuera de lugar.
• Pequeñas sorpresas: Incluye detalles como un pequeño regalo simbólico o una actividad que sepas que le encantará a alguien en particular.

Momentos de conexión que marcan la diferencia

• Dedica tiempo a escuchar: A menudo, escuchar con atención a alguien es más valioso que cualquier regalo. Haz preguntas y muestra interés genuino por lo que otros comparten.
• Involucra a todos: Invita a los más tímidos a participar en conversaciones o actividades de forma natural, sin forzar.
• Crea recuerdos colectivos: Haz una actividad donde todos aporten algo, como escribir deseos en una tarjeta gigante o hacer una foto grupal que todos puedan llevarse de recuerdo.

En definitiva…

Celebrar las pequeñas cosas no solo hace que las fiestas sean más especiales, sino que también fomenta un entorno donde cada persona se siente vista, escuchada y valorada. Al final, son esos momentos de conexión los que definen el verdadero espíritu de la Navidad: compartir, incluir y crear juntos.